La vida es una aventura maravillosa. Estamos aquí para cumplir una misión y para llevarla a cabo necesitamos crecer, aprender, tropezar y levantarnos. Si nos fijamos en cómo fue la vida de Jesús, nos damos cuenta de que todo no fue color de rosas. Vivió feliz, pero también sufrió y lo pasó mal en muchas ocasiones. Él es nuestra esperanza, porque conoce las angustias y dificultades de nuestra vida cotidiana, porque las ha experimentado en carne propia.
Jesús nos comprende perfectamente, porque es uno de los nuestros.
Vivir con esperanza en medio de tiempos difíciles es posible si estamos cerca de Jesús y aprendemos de Él. Además, lo que nos pasa puede ser una oportunidad para ayudar a los demás, por ello, no perdamos de vista que Jesús es quien nos regala todas esas situaciones para aprender y ser esperanza para los que nos rodean.
Testimonio de Pati Trigo
Ángelus
V/ El Ángel del Señor anunció a María.
R/ Y concibió por obra del Espíritu Santo.
Dios te salve, María…
V/ He aquí la esclava del Señor.
R/ Hágase en mí según tu palabra.
Dios te salve, María…
V/ Y el Verbo se hizo carne.
R/ Y habitó entre nosotros.
Dios te salve, María…
V/ Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.
R/ Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Cristo.Oración:
Infunde, Señor, tu gracia en nuestras almas,
para que los que hemos conocido la
Encarnación de tu Divino Hijo, anunciada
por el Ángel, por su Pasión y Muerte
consigamos la gloria de la Resurrección.
Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Gloria al Padre… (3).
Corazón de Jesús, esperanza en los momentos difíciles: no permitas que pierda las oportunidades que Tú me brindas para ser más fuerte y acercarme más a Ti. Sé la Roca donde pueda ponerme a salvo y descansar.
>> Leer la noticia en
