Una nueva aventura comenzaba. Jesús nos estaba esperando

Tocaba levantarse y comenzar un gran día. Nos esperaba nada más y nada menos que “LLAMADOS POR JESÚS”. Qué gran sorpresa nos tenía preparada el Señor. Un encuentro con Él a través del testimonio de un joven y una hermana que nos animaron a seguirle.

El día trascurrió, como suele pasar en Pizarra donde el compartir se transforma en una forma de vivir, entre juegos, canciones… pero Dios en el centro de la historia. Tuvimos la Eucaristía que estuvo llena de simbolismo puesto que le entregamos a Jesús los lastres que nos impedían acercarnos a Él y tuvimos tiempo para estar a “solas” con Él en la oración de la tarde.

Para terminar tuvimos un flashbacks para volver a nuestra infancia y recordar aquellos juegos con los que todos hemos crecido.

Despidiéndonos del Señor con la oración decíamos hasta mañana al primer día de nuestra aventura.

De nuevo la dulce voz de las hermanas nos anunciaba que el día había llegado.

¿Qué nos esperaba? Pues nos esperaba acercarnos a Jesús de una forma distinta…
A través del “SEGUIMIENTO DE SUS EXPERIENCIAS” para ello nos visitaron varias personas que habían tenido encuentros con Jesús la mujer samaritana María Magdalena… y también una chica que quiso compartir su experiencia con nosotros.

Cada vez estábamos mas metidos en el “meollo” de la cuestión nuestras ganas de estar con Jesús iban creciendo con el transcurso del día… Llego la Eucaristía, era domingo de Ramos y así lo celebramos, con la compañía además de unos antiguos miembros de Paz y Bien que vinieron a visitarnos y a recordar sus viejos y añorados tiempos de convivencias.

También subimos a la ermita lo hicimos al estilo de Paz y Bien de la mano de María rezando el rosario.

La noche cayó y llego el momento de divertirnos. Esta velada no era para miedosos porque entre pista y pista te llevabas algún miedo.

El día llego a su fin, le dimos las buenas noches al Señor y a dormir.

Se oyó una guitarra ya había amanecido, qué rápido pasó la noche.

¿De qué ira el tema hoy? Vaya sorpresa, tocaba el “AMOR REDENTOR”. Estuvimos viendo cuánto nos ama Dios, qué da a su Hijo para salvarnos y cuánto nos quiere Jesús que ama hasta el extremo… se da por nosotros. Estuvimos reflexionando sobres las siete palabras de Jesús, nos acercamos a Él de una manera especial… En la Eucaristía y después seguimos en ese ambiente de recogimiento recordando su Pasión con el rezo del Viacrucis.

Decían que había una sorpresa… Por la noche nos visito una corte real… vinieron hasta los reyes desde Italia…

Con la euforia de la visita real nos dispusimos a dar las buenas noches al verdadero Rey.

Esta son las mañanitas… Ya era de día… Qué pronto pasa el tiempo cuando se esta en familia. Ya era el último día.

Ese día se nos encargo una misión. Sí, estamos “ENVIADOS A SER TESTIGOS”. El tema fue presentado a través de música y canciones algo que capto nuestra atención y estuvimos involucrados de lleno en Él. Luego tuvimos un rato de reflexión personal, algo que siempre viene bien.

La Eucaristía fue muy emotiva ya que sería la última que viviéramos allí este año. La oración de la tarde con una adoración que fue el culmen de una gran aventura que no termina en Pizarra si no que comienza ahora.

Llego la noche, hubo entrega de Oscar como si de Hollywood se tratara.

Tras la ultima oración que tendríamos juntos tocaba despedirse, hacer maletas y recoger para tenerlo todo dispuesto para el día siguiente emprender la marcha.